En el patio de un colegio, unos niños se pasan el balón burlones mientras otro corre tras ellos gritando: "el balón es mío y mando yo". En una esquina, un grupo de niñas se arremolina para ver algo que ha sacado una de ellas: una pequeña llave plateada. La pasa de mano en mano y dice misteriosa y solemne: "es de un diario".
No hay comentarios:
Publicar un comentario